La liposucción va dirigida solamente a extraer los depósitos de tejido graso localizados (lipodistrofia). No va dirigida a la obesidad en general.
La piel de individuos más jóvenes tiene mucha más elasticidad, en ellos, tras la extracción de la grasa, la piel se contrae o retrae, presentando después una superficie lisa y suave.
En pieles de más edad esta cualidad elástica está disminuida y es posible que aparezcan ondulaciones o irregularidades después de la liposucción. Estas circunstancias se dan igualmente después de una gran descenso de peso. Las personas jóvenes pueden perder peso con una buena retracción de la superficie de la piel, pero cuando las personas de mayor edad pierden peso, la piel tiene una tendencia a colgar en pliegues y/o presentar irregularidades superficiales.
La piel flácida o la ausencia de una buena elasticidad cutánea limitarán el grado de retracción que se pueda obtener. En tal caso, se debe extraer una cantidad de grasa menor, pero aún así, es posible conseguir una mejora del contorno corporal.
A continuación te mostramos posibles preguntas frecuentes relacionadas con el procedimiento, para que tengas un conocimiento más amplio.
Si aún así surge alguna inquietud, no dudes en consultarnos completando el formulario aquí.