El lifting  piernas se lleva a cabo para corregir la flacidez y exceso de piel de la parte superior de las piernas. Un ejemplo de ésto es el exceso de piel de la cara interna de los muslos, el cual puede generar incomodidad o irritación, dificultad al caminar y/o disconformidad estética. A través del lifting de piernas se retira el exceso graso y la piel sobrante para lograr un muslo firme y más reducido.

Si bien el ejercicio puede fortalecer y mejorar el tono muscular en la parte superior de los muslos, no puede tratar el exceso de piel que ha perdido elasticidad.

Si aún así surge alguna inquietud, no dudes en consultarnos completando el formulario aquí.

Una cirugía estética en los muslos presenta varios riesgos, que incluyen lo siguiente:

  • Cicatrices. Las cicatrices de las incisiones de una cirugía estética en los muslos son permanentes aunque, por lo general, se ubican en áreas poco visibles. En ocasiones excepcionales, las incisiones pueden provocar cicatrices rojas y elevadas. Para mejorar la apariencia de las cicatrices, se pueden usar inyecciones de corticosteroides u otros tratamientos.
  • Asimetría en la forma de los muslos. Esto puede ocurrir como resultado de los cambios durante el proceso de cicatrización. Además, es probable que la cirugía no corrija por completo una asimetría preexistente.
  • Cambios en la sensibilidad de la piel. Durante una cirugía estética en los muslos, la reubicación de los tejidos del muslo puede afectar los nervios sensoriales superficiales. Es posible que sientas cierto entumecimiento temporal que puede durar hasta dos años.
  • Problemas con los puntos. Los puntos usados para fijar la nueva forma del muslo podrían llegar hasta la superficie de la piel y sería necesario retirarlos. Esto puede causar inflamación en la piel afectada. Como consecuencia, es posible que debas someterte a otra cirugía.
  • Alteración transitoria de la circulación venosa superficial y linfática. Durante la cirugía se pueden dañar vasos venosos superficiales y/o linfáticos, provocando una inflamación más prolongada y la necesidad de utilizar prendas compresivas por un período mayor.

Al igual que otro tipo de cirugía mayor, una cirugía estética en los muslos presenta riesgos de sangrado, infección y reacción adversa a la anestesia.

Se realizarán incisiones en la parte interior de los muslos. La longitud y el patrón de las incisiones dependerán de cuánta piel se extraerá. Pudiendo ser en forma de semiluna o de una «T».

Después de realizar las incisiones, se tensarán los tejidos que se encuentran por debajo y se asegurarán con puntos. También podemos usar una técnica de succión para eliminar la grasa (liposucción).

Se vendará la piel sobre los nuevos contornos y se extraerá el exceso de piel. Se utilizarán puntos de sutura para cerrar las incisiones.

El procedimiento suele tardar entre una hora y media y dos horas.
Generalmente se utiliza la sedación asociada a anestesia local, la anestesia regional (raquídea) o  anestesia general, todas ellas requieren los servicios de un Anestesiólogo/a. Se completará un formulario pre-anestésico que será enviado al Anestesiólogo para su evaluación pre-operatoria.
Después de la cirugía estética en los muslos, las incisiones se recubrirán con vendas. Los muslos se envolverán holgadamente con vendas elásticas o prendas especiales para reducir la hinchazón. Es posible que te coloquen pequeños tubos para drenar el exceso de sangre o de líquido.

Es posible que debas usar un vendaje o una calza de compresión durante algunas semanas después de la cirugía.

Durante los primeros días posteriores al procedimiento:

  • Evita levantar la rodilla por encima del nivel de la cadera.
  • Evita las actividades de esfuerzo con los muslos que podrían estirar las incisiones durante unas seis semanas después de la cirugía.
  • Toma los analgésicos, indicados por los médicos, que necesites para controlar las molestias.
  • Podrás retomar los ejercicios aeróbicos livianos apenas sientas que puedes hacerlo. Sin embargo, deberás limitar los ejercicios y otras actividades que puedan estirar las incisiones y provocar que estas se separen. Generalmente, unas seis semanas después de la cirugía ya será seguro que retomes todas las actividades, pero consulta con el cirujano acerca de algunas recomendaciones específicas para tu caso.

Se recomienda colocar filtro solar sobre las incisiones durante los próximos seis meses o hasta que se esfume el color rosa, para prevenir cambios de color oscuros de la piel.